Catedral de San Giles

Majestuosa y con una silueta inconfundible, la Catedral de San Giles es uno de los símbolos más emblemáticos de Edimburgo. Situada en pleno corazón de la Royal Mile, este templo destaca por su impresionante arquitectura gótica y su campanario coronado por una llamativa corona de espinas. Al cruzar sus puertas, el visitante se sumerge en un espacio lleno de historia, arte y espiritualidad, rodeado de coloridas vidrieras y tallas antiguas que narran siglos de vida escocesa.

Un vistazo a su historia

Fundada en el siglo XII, la catedral ha sido testigo de numerosos acontecimientos trascendentales para Escocia, incluidos actos religiosos y políticos cruciales durante la Reforma escocesa. A lo largo de los siglos, ha sufrido varias remodelaciones que han dado lugar a su aspecto actual, integrando estilos arquitectónicos y elementos decorativos muy diversos, convirtiéndola en una joya del patrimonio de Edimburgo.

¿Cuál es la mejor época para visitarla?

La catedral se puede visitar durante todo el año, pero la primavera y el verano aportan una luz especial que realza el resplandor de sus vidrieras y el ambiente animado de la Royal Mile. En los meses de invierno, disfrutarás de un ambiente más tranquilo y podrás apreciar con calma todos los detalles del interior.

¿Se puede acceder libremente?

La entrada es gratuita, aunque se sugiere una donación para ayudar al mantenimiento del edificio. Algunas zonas, como la famosa capilla de los Thistle, tienen una pequeña tarifa de acceso adicional.

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